sábado, 30 de agosto de 2014

Trapos Sucios On Line



 
¿Qué fue de aquella época en la que solo la prensa tenía voz? Aquella época donde los jugadores hablaban de pascuas a ramos, y solo del último partido, pasó a mejor vida hace mucho tiempo.
Yo era de las que de pequeña le lloraba a su padre para que le comprara fotos de los jugadores y los domingos al salir de misa, el marca. Sí, de esas que ahora apodamos mojabragas.
"Trabajaba" en el negocio familiar y me peleaba –cuando había colegio- con los chicos de clase; mi única defensa era replicar con lo leído -ahora conocido como panfleto- en el marca, y en verano los amigos de mi padre se sorprendían de que supiera mejor que ellos alineaciones, lesiones, declaraciones…Ahora, tristemente, todo eso es impensable.

Las nuevas tecnologías, redes sociales y acceso a toda la información que queremos, están a nuestra disposición. Saber a golpe de tecla -o pantalla según el nivel tecnológico- lo que necesitamos está a la orden del día y como dice @victor7804, tenemos el mundo en nuestras manos. Eso ya lo tienen los jugadores con menos esfuerzo que nosotros, pero muchos de ellos, o sus parientas, perdieron la perspectiva de lo que suponen mediáticamente las redes sociales.

No entraré a nivel general, porque no acabaríamos nunca desde los tuits de @iriaot a mou y  los madridistas hasta los de @aarbeloa17, más recientemente.
Tampoco tengo mucha antigüedad en esto de twitter, la tecnología y yo somos rivales reconocidos hace muchos años ya - y soy como una abuela jubilada manejándola-  pero incluso con mi mínimo conocimiento en este campo, llego a entender la trascendencia que pueden llegar a tener.
Sé que no tenemos peso, o no nos lo quieren dar, pero realmente sí tenemos voz cuando dos actos igual de reprochables -por una u otra cuestión- son expuestos o no, en un telediario nacional.

Todo esto comenzó con un escrito en Instagram contra Mou y Diego, en el que los ponían a caer de un guindo e Iker marcó como “me gusta”. A nuestro capitán puede gustarle o no, compartir opinión o simplemente conocer al que firma dicho escrito…pero es el capitán del Real Madrid, con todo lo que ello conlleva, aunque lamentablemente hace ya tiempo que lo olvidó.
Por supuesto esto tuvo su trascendencia, pero todo pareció indicar que solo en tuiter, y hace a apenas unos días el juego comenzaba.
 
 
No sé vosotros, pero de nuevo yo no oí crítica fuera de nuestro mundo 3.0

Más recientemente, una web madridista publicó una guía -con artículo de Iker incluido- que Arbeloa retuiteó para todos sus seguidores y ¡bingo! La carnaza estaba servida.
Las críticas no se hicieron esperar por parte del sector casillista -más mediático que el que defiende a Arbeloa- e incluso entre la otra parte del madridismo comenzaron críticas agarrándose a ser imparciales y justos, criticando a ambos por igual. Puede ser así, pero yo me pregunto ¿la pasión por el fútbol permite ser neutral? ¿esa pasión no te hace defender lo que creas por encima de todo, con más o menos razón?
No hay que confundir doble rasero con imparcialidad, quien siente los colores sabe cómo hacer una crítica y una defensa.

¿Qué pasó? Arbeloa, optó -y estoy completamente de acuerdo, aunque se me criticara y se me critique- por redactar un escrito de rectificación.
 
 
Sí retuitea porque retuitea y si rectifica porque rectifica, de nuevo le llovieron críticas por bajar la cabeza y echarse para atrás ante las críticas…¿el resultado? La mayoría de telediarios se hicieron eco -de esto sí- sin mencionar en muchos de ellos los me gusta de su capitán.

Por suerte, no todo es malo en nuestro mundo v
irtual –que gracias a Dios no lo es siempre- y de vez en cuando podemos encontrar sorpresas como esta, en esta ocasión no sé en que plataforma Diego quiso hacer público cómo se sentía antes de su carta publicada en la página web del Real Madrid.

 Ya sea red social o vía club, el peso de las opiniones -nuestras o de un personaje público- tienen su repercusión en mayor o menor medida. Todo lo que sea vender panfletos o periódicos serios -si es que aún queda alguno- será manipulado en función de su beneficio y utilizado para poner a las masas -más borregas o no- a su favor.

Podemos enfrentarnos entre nosotros todo lo que queramos y contra los jugadores, pero nada cae en saco roto y no se nos puede olvidar que buena parte de nuestra voz quedará escrita para siempre en nuestros tuits, utilicemos bien las armas que tenemos…

Para mí todo se resume así…pero repito para mí, Álvaro Arbeloa antepuso la imagen del club a su individualidad, y ese hecho le convierte en más madridista y capitán que el nombrado como tal.

 
 
Al final lo único que nos queda es....
 
Hala Madrid y Nada Más.
(Agosto, 2014)
 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario